El lado humano de la nueva Central de Telégrafos
La inauguración de la nueva central de Telégrafos del Palacio de Comunicaciones constituyó un acontecimiento, que fué recogido por la Prensa española con extensos y destacados artículos. El diario 'El Sol', por ejemplo, anunciaba que, coincidiendo con la festividad del santo del Rey Alfonso XIII, se inauguraría este "expléndido trabajo llevado a cabo por los funcionarios de la Corporación telegráfica. La nueva instalación se ubicó en el piso central del palacio, ocupando tres grandes salones, con 48 aparatos Hughes, 30 sistemas Morse (montados a doble banda y ¡capaces de recibir 60 hilos simultáneamente!, lo que para la época era en no va más), y la instalación central con los Baudot (9 centralitas duplex y 16 cuadruples, con 2 retransmisiones también cuádruples), con un conmutador general considerado como una obra maestra del montaje eléctrico.
Importancia de las personas. Junto a las 'salas de aparatos' estaba el despacho del director de servicio (con cuarto de descanso, lo que dá idea de las largas jornadas laborales de aquellos años), otro despacho que ocupaba el personal del Departamento de Censura y el último para enlazar el servicio de telegrafía con los diferentes ministerios de la Administración del Reino. Un comedor colectivo para los funcionarios y el área de descanso general (seis habitaciones dobles y dos sencillas) con camas "a fin de evitar que tengan que retirarse a sus domicilios los funcionarios que, viviendo lejos del centro de la población, terminen su servicio a altas horas de la madrugada". Para su aseo disponían también de cuartos de baño con calentadores eléctricos (todo un lujo para la época), con 400 armarios individuales para guardar la ropa y enseres personales. Por supuesto las "señoritas telegrafistas" disponían de dormitorios y aseos propios.
La Comisión Ejecutiva. El montaje del nuevo Centro de Telégrafos correspondió a una Comisión Ejecutiva, encargada de realizar el complejo montaje, formado por el jefe de Centro, Trino Esplá y Visconti; el ingeniero de Telecomunicaciones Lauro de las Cuevas, y los funcionarios Ortega García Gil y Aranda, que "por la competencia y la notabilidad con que han llenado su cometido, se hacen acreedores a los mayores aplausos, tanto más si se tienen en cuenta las dificultades de toda índole que han sabido vences gallardamente", según 'El Sol'.
La ComisiónTécnica. La denominada 'Comisión Técnica para el Traslado de las Centrales', hubo de sortear junto a la Comisión Ejecutiva, numerosas "dificultades" entre las que destacarían las frecuentes huelgas de obreros, la falta de material, la carencia de aparatos, materiales y conductores, la desorganización de los transportes, la informalidad de los contratistas de obras y el incumplimiento de numerosos contratos comerciales.
Las Autoridades inaugurando. El ministro de la Gobernación, el Conde de Coello de Portugal, junto con el director general de Correos y Telégrafos, el Conde de Colombi, y la cúpula del Telégrafo, recorrerían el 23 de febrero de 1922 la nueva Central de Telégrafos. Antes habían impuesto la Cruz de Beneficencia a los directores-gerentes de los Colegios de Huérfanos de Telégrafos y Correos, Miguel de Lara y Tomás Sánchez Pacheco, en el salón de actos del Palacio de Comunicaciones (momento que recoge la fotografía).

Imagen a mayor tamaño de los participantes en la visita inaugural.
...y los Celadores. El grupo de celadores que intervinieron en el nuevo tendido de líneas (posando para la histórica fotografía, con el fondo de una de las tres salas de aparatos), estuvo formado (de izquierda a derecha), por los funcionarios José Muñoz y Lorenzo Lobo, sentados están Cirilo González, Blas Antona (el capataz de la brigada) y Florentino Moreno; y de pié Joaquín Medina, Emilio Zafra y José Muñoz.
Cordiales saludos,
EQ