Nuestro secretario de Estado para el deporte quiere entrar en conflicto armado contra Australia. Y no le falta razón. Enorme ofensa nos hicieron, nada más y nada menos que entonar, por error, el Himno de las Repúblicas (I y II) en un acto deportivo, con el graderío roji-gualdo pintada la cara y con las banderas al viento listas para escuchar nuestro "chunda-chunda tará-tará tachunda..." fueron heridos en el orgullo ibérico cuando no sonaron los acordes adecuados. El sr. secretario dijo: "pediré al embajador de España que se dirija al Gobierno australiano para que investigue cómo pudo producirse esta ofensa intolerable... de forma que desde el punto de vista deportivo se corrija el origen del problema por esta ofensa a la nación española." [sic]
Señores foreros, preparaos, la invasión se acerca, no pararemos hasta que en Melbourne se enarbole nuestra bandera y cantemos aquello de "...del pueblo español, que vuelve a resurgir..."
Saludos.
