Ante la reciente plaga de licántropos que afecta nuestro territorio, las autoridades locales han puesto en marcha un plan de protección para combatir tan peligrosa enfermedad y minimizar los estragos que causa en nuestras aldeas, tan alejadas de los confores y adelantos del orbe perejilense.

El sello lleva una imagen que representa a Lon Chaney en el momento previo a devorar a una atractiva señorita y además del valor de franqueo, un recargo de 5 euros perejileros que serán dedicados a la compra de balas de plata y agua bendita para dotar a nuestras más recónditas parroquias de eficaces métodos para combatir la plaga.
Desde esta remota colonia pedimos a la Suprema Boinez la autorización pertinente para ponerlo en circulación.