Efectivamente, es un signo más de que "la vaca se está secando".
Y un indicador muy claro de la evolución de los tiempos. Una evolución (ya muy vieja; esto no viene de anteayer) a la que muchos agentes que intervienen en la filatelia no quieren mirar a la cara y prefieren ocultar la cabeza como el avestruz para no enfrentarse a ella.
A mí, en principio, no me parece ni bien ni mal que se tenga que sacar 170 matasellos conmemorativos al año o que solo salgan 7. Es más, de preferir, preferiría siempre un número más bajo que alto; porque las colecciones más excelsas de cualquier cosa precisan de un número limitado de ejemplares y no de sobresaturación de efectos. Precisamente, uno de los elementos que más ha dañado la filatelia en los últimos años (y en los que tampoco nadie ha querido reparar) ha sido la sobreabundancia de efectos (¿son necesarios 100 sellos al año a 4,50 €? No; es otra forma de secar la vaca. ¿Ayudan o perjudican al coleccionismo los tusellos (incontrolables sus dimensiones)? Yo creo que le han perjudicado mucho.
Partiendo de esto, deberíamos preguntarnos: La emisión de matasellos conmemorativos por cientos de sociedades filatélicas (desde hace muchos años, muchas de ellas sostenidas falsamente con 4 socios medio falsos; en muchos casos para apuntalar poltronas de federaciones), ¿ayudaba al coleccionismo global de filatelia o más bien lo enrarecía? Yo creo que lo segundo, porque no se pensaba nunca en el coleccionismo global, sino tan solo se pensaba egoístamente en pedir los matasellos como un modo de autofinaciación de esas sociedades (engañando a sus propios miembros, que eran los que compraban esos efectos desde hace muchos años; casi nadie de fuera de esas sociedades lo hacía). Se pagaban 250 €, se recaudaban 500,
et voilà.
Pero ahora se encuentran con que no es sostenible porque pagan 250 € pero no los recaudan porque tienen 4 miembros.
Quizás la solución sea muy simple. Que no tiene sentido que en el año 2022 sigamos con la mentalidad de 1961. Que no tiene sentido que en Villarriba de arriba haya una sociedad filatélica de 4 miembros y en Villarriba de abajo una de 3 miembros. ¿Por qué pelotas no se fusionan de una vez y hacen una sociedad conjunta? (Entre otras cosas porque el asociacionismo, como su propio nombre indica, implica asociar lo más posible; no disgregarse o escindirse). ¿Y por qué los 3 miembros de Villarriba de abajo, en vez de lamerse tanto sus ombligos mutuos, no buscan nuevas formas de "encontrarse con más gente" (por ejemplo, a través de internet y este mismo foro)?
Quizás porque en la filatelia territorial hay mucho reino de taifas. Y nunca se quiere incidir sobre esto, ni exponer todos los vicios arraigados que hay en ese obsoleto, vetusto y cadavérico sistema. Pues allá sus ombligos, pero no es solo la vaca de Correos la que se está secando con este tema, sino su propia vaca (esas pequeñas asociaciones que están condenadas a morir -en realidad, llevan en estado de muertos vivientes desde hace varias décadas-, si no quieren evolucionar).
Saliéndome de la filatelia, al final, los habitantes de Villanueva de la Serena y los de Don Benito han sido pioneros (y eso que no eran municipios precisamente pequeños). Lo cojonudo es que hay 6000 pueblos en España de menos de 100 habitantes, que ni se plantean fusionarse con el pueblo que tienen pegado al lado, porque...

Igual solo porque de los dos alcaldes solo puede quedar uno; igual que muchos presidentes de asociaciones filatélicas de 3 miembros que llevan 47 años en el 'cargo' no quieren perderlo.
"No preguntemos si estamos plenamente de acuerdo, tan sólo si marchamos por el mismo camino" (Goethe)