Aunque también se puede realizar el dibujo directamente en el ordenador con un programa informático específico, esta de la imagen es otra de las maneras de producir sellos calcográficos sin que haya grabado efectivo a buril. Luego en unos sellos se nota el embeleco más que en otros, e incluso en algunos es imposible de detectar, aunque en muchos italianos y españoles de los últimos años, la artificiosidad es muy evidente.
De todas maneras, cada sello es un mundo, y hay que mirarlos uno por uno. En Francia, por ejemplo, los grabados se siguen realizando a buril, pero la transferencia al cilindro de impresión es electromecánica desde hace unos 10 ó 15 años. ¿Se nota o es importante que ya no se realice esa transferencia intermedia a través de la moleta? Para saber esto con certeza, tendríamos que ver el mismo sello impreso con ambas transferencias, y analizarlo meticulosamente.
Traduzco el pie de foto de este sello de
Martin Mörck (Groenlandia, 2012), procedente de un artículo publicado hace pocas semanas en la revista
Linn’s Stamp News.
En lugar de grabados tradicionales a buril, algunos sellos calcográficos recientes son dibujos a tinta que escaneados se graban después con tecnología láser en los cilindros de impresión. Groenlandia emitió el primer grabado con pluma y tinta de Mörck en un sello de 2012.