Un servidor siempre ha corrido ese riesgo, pero lo cierto es que, con los materiales a mi disposición, siempre he tratado del equilibrio, la estética y la mejor manera de expresar lo que se pretenda incluir en la colección.
Son muchos los cientos de ejemplos expuestos durante varias décadas, a partir de los cuales, con otros materiales, incluso mejores, se puede mejorar el ejemplo ¿Por qué no?. Esa es la grandeza de la filatelia, pues la suerte no es patrimonio de unos pocos.
Y si del código postal pasamos a los matasellos de los grandes eventos: EXPO-92; Referéndum Nacional; Día de la Constitución, etc. y otros que el coleccionista descubrirá, nos encontramos que incluso sin recursos se pueden incrementar las colecciones.
Josellito para lo que queráis mandar, opinar, incluso corregir, ¡faltaría más!
