Señora, cuando llegue su hija, por favor 
déle este disco de mi parte y dígale que es muy importante para mi este bolero, también me gustaría que fuese para ella. 
La señora mamá de la pretendida le respondió:
Tranquilo muchacho, se lo daré de tu parte. 
Nada más marcharse Xavier por donde vino, la vieja se puso a escuchar el disco en su gramola, pues aunque disimulaba, siempre pensó que ese pelagatos no era merecedor de su niña.
El disco comenzaba diciendo:
Por la mañana te besaré en la frente
Por la tarde te besaré en la cara
Y por la noche te besaré en la boca.
Esto ultimo,
no le gustó nada a la mamá y pensó ¿Qué se creerá este mamarracho? 
Volvió a poner el disco y justo lo paró cuando cantaba la estrofa del beso en la boca. Lo agarró y con la punta de unas tijeras,
le hizo unos surcos en la parte de dicha estrofa.En esto llega la niña “la que hoy es esposa de Xavier” acompañada de unas amigas y la mamá le da el disco diciéndole:
Mira hija, esto te lo trajo el pelagatos, ese que rejunta papelitos de colores. La muchacha, más contenta que las castañuelas,
se va con sus amigas a la habitación y pone el “single” en su tragadiscos y comienza a escuchar el bolero que dice: Por la mañana te besaré en la frente
Por la tarde te besaré en la cara
Y por la noche..traca trák..traca trák.. traca trák.. traca trák.. traca trák.. traca trák.. traca trák..
