"It's the economy, stupid", que diría Clinton; o
"es el mercado, amigo", que diría Porky.
Los sellos podrán desaparecer (pero en un futuro quizás no tan cercano y que quizás no veamos nosotros); al fin y al cabo, es verdad que los sellos son solo un elemento accesorio al sistema de correo: pueden ser sustituidos por otra cosa que haga la misma función (que nos obliguen a pagar en oficina la carta, p. ej.). En cualquier caso, los países que eliminen los sellos porque quieran ser más modernos que Picasso tendrán que asumir que: 1) el volumen de correo que gestionen descenderá, porque haya gente que mande menos cartas si no hay sellos, bien por boicot o bien porque el sistema de ir a la oficina le cueste energéticamente más que echar la carta al buzón, y 2) que pierden una fuente (pequeña, pero fuente al fin y al cabo) de ingresos por venta de sellos. Oye, deben ser unos países muy ricos para renunciar a una fuente de ingresos, por pequeña que sea; no tengo tan claro que los países más pobres lo hagan. Y no tengo tan claro que lo hagan Mónaco, Vaticano o San Marino, cuya venta de sellos constituye un porcentaje nada irrisorio de su PIB. Entre otras cosas en Mónaco, con el PIB más alto del mundo, la venta de sellos cubre perfectamente la exención total de impuestos a sus ciudadanos. Ahora, vete a decirles a los monegascos que tienen que pagar impuestos porque dejan de vender sellos; le guillotinan a Alberto, vamos.
Es el mercado, amigo.
Y la matraca de la desaparición del dinero físico la llevo oyendo 15 años. Sí, sé perfectamente que están en ello, y que los
lobbies bancarios llevan mucho tiempo presionando para ello, sobre todo desde que, después del 2007, empezara a descender la cuota de capital gestionada por los bancos, que entonces era de más del 90% del capital total (del 93-94%, creo, en su momento más álgido), y hoy ha descendido por debajo del 85% (y eso contando lo 'oficial', lo que 'aflora', y no tiene en cuenta narcotraficantes, dinero negro o, simplemente, indocumentados que no pueden acceder a la banca). La pérdida de confianza en la banca después de los Lehmans brothers ha retraído mucho capital de su sistema y están todo el día con la matraca de que nos pongan un chip a todos (y lo gestionen ellos, claro) y paguemos con ese chip. OK, pero en el siglo que viene. Ya se han hecho experimentos y han fracasado porque no tienen en cuenta toooooodo el capital que se dejaría de mover (y que se dejaría de ganar por el capitalismo). Más allá del 15% de dinero que no se centraliza a través de sistemas bancarios estaría el de:

1) Las personas con dificultades para el uso de sistemas virtuales (especialmente con el dinero, porque algunos son hasta susceptibles a no poder tocarlo). Mi padre tiene cartilla bancaria y no está en ese 15%, pero también tiene 87 años y si le hacen pagar por cojones con el móvil pues tendrá que adaptarse a ello para sobrevivir (que es lo que piensan los "iluminados" que proponen eso:
"que se joda la gente, que ya pasará por el aro"), pero probablemente, llegado ese momento consuma la cuarta parte de lo que hace ahora; a ver qué les parece eso a esos "iluminados" cuando vean una crisis de consumo inimaginable.

2) Las sociedades humanas se 'adaptan' que te cagas, son súpermoldeables, y "hecha la ley, hecha la trampa". Cuando eso llegue, lo único que va a ocurrir es que algún "iluminado" más maligno que los "iluminados" de los lobbies bancarios de Suiza, Bruselas o Wall Street "invente" otro dinero de papel, aunque solo sea para gestionar todo el nicho que quedará sin ocupar por el dinero virtual. Y bien, oye, no pasa nada: el 70% de las transacciones comerciales se harán a la fuerza súperblanqueaditas por el sistema conocido y entonces todo virtual, pero habrá un 30% de transacciones económicas que se harán fuera de ese sistema (negro, negrísimo, dinero más negro que el tizón) sobre el que el sistema blanqueadito no tendrá ningún control ni ninguna capacidad de sangrar fiscalmente; ergo, hundimiento inmediato de las economías, muy modernitas, pero en bancarrota los estados.

3) Añade a todo esto los indocumentados, inmigrantes ilegales o, simplemente, personas que no quieren que les fiscalicen (y conspiranoicos, negacionistas, ultraderecha reaccionaria anarcoide, etc., etc.). En los USA, por ejemplo, esta veleidad de burguesitos muy europea ni se la plantean porque el porcentaje de gente en USA que vive y siente fuera del sistema es altísimo e incluye a gente de bien, muy trumpiana, que vive en su rancho de Nebraska o en sus praderas de Oklahoma, pero tiene una desconfianza absoluta contra todo lo 'federal' y sobre todo contra las élites de Wall Street y paga con papel como dios manda y ni se plantean que venga uno de Washington a ponerles un chip en su cerebro o en el móvil para pagar. Antes le meten un tiro con su winchester a quien sea. O antes, un iluminadito maligno de Nebraska inventará un dinero papel de Nebraska para que los del rancho de Nebraska paguen en la gasolinera de su pueblo de Nebraska, en el bar, en el campo de tiro y en el Wall Mart, que, en realidad, es para lo único que lo necesitan. Y el fisco americano va a ver leches de ese dinero, y si ya está al borde de la bancarrota continua el estado federal USA (estamos bordeando todos los días el que no puedan pagar a los funcionarios), con todo esto, ya te digo. Sí, mañana lo vemos.
Pues eso; de momento, como muy bien dice José Luis, vivamos el presente y lo demás... ya veremos. He visto muchos anuncios apocalípticos de "se va a acabar el mundo" y aquí seguimos de momento. ¡Ah!, y si tenemos que ponernos las pilas con algo, como también apunta bien José Luis (por ejemplo, mandar cartas, que de momento eso es lo que en este hilo estamos), mejor ahora que cuando ya sea irreversible, ¿no?

"No preguntemos si estamos plenamente de acuerdo, tan sólo si marchamos por el mismo camino" (Goethe)