¿Voló la Maja en Zeppelin?
Hasta donde sé,
la respuesta es: NO. Lo único que le faltaba a los sellos de
la emisión Quinta de Goya de 1930, es haber viajado en globo (o, mejor dicho, en dirigible). Durante los días en que estos sellos tuvieron valor postal (del 15 al 17 de Junio el Graf Zeppelin no voló desde Sevilla). Pero
la espectacular carta que nos muestra Manolo, bien merece profundizar un poco en lo que oculta (o mejor dicho, en lo que pretende mostrar, con
la complicidad del conocimiento filatélico) este fascinante montaje.
Para empezar, los franqueos parecen corresponderse con
la tarifa a Alemania de cartas de correo aéreo. Aunque no tengo a mano el interesante librito-estudio sobre Sevilla y los vuelos del Graf Zeppelin (editado por
la Sociedad Filatélica Sevillana), es evidente que el 15 de Junio de 1930 no tuvo lugar ningún vuelo en dirigible. Tengo también mis dudas del vuelo del Graf Zeppelin a que hace referencia
la pieza (de Sevilla a Friedrichsafhen, con escala en París), por el que
la carta supuestamente salió de
la capital hispalense el 12 de Agosto (según reza el matasellos de correo aéreo de Sevilla) se celebrara.
En un primer vistazo, está claro que
la carta (vendida en 1.200 euros en una prestigiada casa alemana de subastas) es del mismo artífice que
la que muestro a continuación.
La coincidencia de destinatario (F. W. Kummer, ¿estamos tal vez ante el 'autor'?) no deja lugar a dudas.
Lo mismo ocurre con las marcas oval y lineal del vuelo del Graf Zeppelin, estampadas en rojo. También
la carta que muestro más abajo (esta con valores de los Caprichos y el matasellos especial para correo aéreo) completa su franqueo con tres sellos de Vaquer, obliterados con idéntico cuño hexagonal de correo aéreo de Sevilla, el mismo día (12 de Agosto de 1930), casi dos meses después de
la fecha del matasellos especial del pabellón Quinta de Goya de
la Exposición Iberoamericana de Sevilla (ambos son del primer día de circulación de
la emisión: el 15 Junio 1930).
Por tanto, si hemos de creer lo que pretende que creamos el artífice de
la carta,
la 'pieza' se fabricó en dos fases. En
la primera, el 15 de Junio, adhirió los sellos de Goya y los matasello de favor en
la estafeta del pabellón 'Quinta de Goya' de
la Exposición Iberoamericana de Sevilla. Y, en una segunda fase, añadió los de sellos de Alfonso XIII y mandó
la carta a
la lista de correos de Friedrichsafhen, siendo matasellados por el cuño de correo aéreo de Sevilla. Pero me temo que eso es, precisamente, lo que quiere hacérsenos creer.
Esta otra carta (con sellos de
la serie para correo aéreo y el matasellos especial para correo aéreo, también primer día de emisión), tiene idéntica construcción formal a
la primera. Sorprende que, pese a su impecable factura, parte de
la estampación del matasellos especial de
la Iberoamericana del lado inferior izquierdo esté fuera del sobre. ¿Para no obliterar los sellos de Alfonso XIII? Imposible, ya que no podían estar ahí el 15 de Junio, puesto que
la fecha de su pretendida obliteración es casi dos meses posterior. ¿O, tal vez, para dejar sitio a los sellos de Alfonso XIII y al matasellos aéreo de Sevilla? Habida cuenta de que el matasellos parece auténtico, esta opción parece
la más plausible y aportaría
la explicación filatélico-postal de este fascinante engendro.
Pero
la voracidad del 'fabricante' acaba por darnos nuevas pistas. Véase
la última carta, franqueada con sellos de Marruecos y también destinada a Kummer, con el mismo matasellos hexagonal de correo aéreo de Sevilla, ¿obliterando sellos de Marruecos?. En este caso, se trata de una carta supuestamente circulada en el vuelo directo (sin escala en París) del Graf Zeppelin, que salió el 2 de Junio de 1930 de Sevilla, y llegó el 6 de Junio a Friedrichsafhen (de acuerdo con las impecables estampaciones de los matasellos). Por cierto, está dirigida a una tal Mrs. A Kummer, en Cotbus... ¿su madre, hermana, esposa?
En mi opinión, se trata de un montaje (de lo más efectista, eso sí) y realmente bien trabajado. A
la vista del precio alcanzado, con notable éxito.
La cuestión es si se trata de un montaje "de
la época", o es una falsificación posterior. El matasellos especial para correo ordinario parece auténtico (no responde a ninguno de las falsificaciones que hemos estudiado en este hilo), lo que abona
la teoría de que
la carta, pese a ser descaradamente filatélica, sería "de época".
Con todo, para mi que
la Maja no voló en globo. Al menos en este. No obstante,
la pieza se presta a valoraciones contrapuestas y por eso pido las opiniones de nuestros doctos colegas del Ágora. A ver, entre todos, qué concluímos (haciendo abstracción de los miles de euros pagados por estas cartas, precisamente en Alemania, patria del Graf Zeppelin, y en una de las casas de subastas más prestigiadas del mundo).
Cordiales saludos,
EQ