-Yo estuve en la Plaza Mayor el primer domingo de este año por primera vez, y mi experiencia fue más o menos la misma que comenta franqueos.
-La verdad es que acostumbrado al trato tan amable de prácticamente todos los vendedores de la Lonja aquí en Valencia, la diferencia es notable.
-Y no de ahora. Yo recuerdo de niño, con 14 ó 15 años, cuando me dió por primera vez por la filatelia, me acercaba muchos domingos a comprar sellos entonces de peseta y el trato era igual.
-Recuerdo una anécdota entrañable con un vendedor que hace unos años se jubiló y que muchos conocereis:
Pedro Bello de Petrer (Alicante), que venía todos los domingos con su mujer, ambos de edad ya avanzada. La primera vez que me acerqué a su puesto, (cuando aun estaban dentro de la Lonja), me preguntó nada más acercarme que que deseaba. Le indiqué que sólo estaba mirando, y me dijo que cogiera los albumes que quisiera y si quería algo más se lo indicara, cosa que hice.
-Volví a ir varios domingos, y uno de ellos me volví a cercar ya que el trato era siempre muy agradable. Me enseñó todo lo que le pedí, incluso vendiendome sellos sueltos rompiendo series enteras en sellos de la república. Me presento a su mujer y me comentó varias anecdotas de su vida.
-Al poco rato y antes de irme me vió que estaba ojeando la serie del centenario y me preguntó ¿te interesa?. Si, le contesté pero no puedo pagarla, se me va de precio. La mujer que estaba oyendo la conversación indicó: claro que le gusta, ¿no ves como la mira?. deja que se la lleve y que la pague a plazos.
-Despues de negarme inicialmente acepté y se la fuí pagando en varios plazos cuando me acercaba los domingos. Despues de jubilarse, me dejó su teléfono y aun le compre varias cosas más de su propia colección. Nada de esto hubiera sucedido si el trato inicial cuando no me conocian hubiera sido hostíl.
(Despues como algunos recordareis sucedió lo de mi casa, pero eso es otra história).
-Puede pensarse que es una situación excepcional, pero con los actuales vendedores el trato es exactamente igual o incluso mejor.
-Por eso me extrañó la frialdad y la distancia de la Plaza Mayor. y no comprendo como tienen cosas a la venta y no quieran venderlas.
-Me ha quedado en ladrillo, lo siento
